Las demencias

(Enfermedad de Alzheimer, Enfermedad de Parkinson con demencia y otros trastornos relacionados) son probablemente los trastornos clínicos más importantes de nuestro tiempo en términos de sobrecarga para los individuos afectados y sus familias y, desde luego, de coste para la sociedad. La Enfermedad de Alzheimer supone entre el 60% y el 80 % de los casos de demencia.

Se estima que en España hay actualmente entre 600.000 y 1 millón de pacientes diagnosticados de la Enfermedad de Alzheimer, el principal tipo de demencia a partir de los 65 años de edad. Cada año aparecen en nuestro país casi 100.000 nuevos casos de la enfermedad en lo que se ha calificado casi como una verdadera epidemia, que tanto preocupa a la sociedad, a los expertos y a las autoridades.

¿Se pueden prevenir las demencias?

Esa es La Pregunta, con mayúsculas. En este artículo repasaremos brevemente algunos datos importantes de las demencias, para posteriormente centrarnos en las medidas preventivas de la enfermedad actualmente en uso o investigación.

Factores de riesgo

La edad y una historia familiar de enfermedad son los dos principales factores de riesgo de este devastador trastorno. Una historia de parentesco de primer grado con un enfermo que sufra la enfermedad incrementa 3 veces el riesgo de contraerla. Esta relación es especialmente cierta en los casos en los que la enfermedad aparecer precozmente, es decir, en personas más jóvenes. Se ha constatado que las mujeres presentan mayor riesgo de Enfermedad de Alzheimer que los hombres.

Un nivel educativo bajo es un factor de riesgo conocido para desarrollar Enfermedad de Alzheimer. Los traumatismos craneales con pérdida de conciencia también incrementan el riesgo. Por último, se ha comprobado que la arteriosclerosis es un factor de riesgo tanto para la Enfermedad de Alzheimer como para otro tipo de demencia llamada vascular.

La enfermedad de Parkinson, ese trastorno neurológico tan común en los ancianos y caracterizado entre otros signos y síntomas por la aparición de temblor, se asocia con un riesgo aumentado de demencia. Aproximadamente de 1 a 4 pacientes con Enfermedad de Parkinson acabará desarrollando la demencia.